Seguramente has escuchado o leído alguna vez en las noticias que el valor de la acción de tal compañía ha subido o ha bajado por x razón, que los accionistas entraron en pánico o titulares similares.
Pero, ¿sabes qué es una acción bursátil?
1. Diferencia entre deuda y acción
Para explicarlo voy a rescatar el ejemplo de la chocolatería de este artículo. En este ejemplo, se pretendía montar un negocio para la venta de chocolate con churros en Alemania. Se requería de un capital inicial de 50.000 €, pero el generador de la idea sólo se disponía de 20.000 €. Para la financiación del resto, se solicitaba un crédito al banco o se pedía dinero prestado a otros acreedores a cambio de abonar unos intereses o cupones establecidos. A este proceso lo llamamos deuda.
Ahora imagina que en lugar de endeudarse, le comentas tu idea de negocio a un amigo tuyo y éste -entusiasmado- no sólo quiere prestarte el dinero, sino que quiere convertirse en tu socio poniendo también 20.000 € de su bolsillo. Él no espera recibir su dinero invertido más unos intereses asignados previamente, sino que se convierte en copropietario de la chocolatería con la esperanza de disfrutar de los futuros beneficios (o sufrir las pérdidas).
Para los 10.000 € restantes, ambos amigos emiten 100 participaciones a 100 € cada una. Estas participaciones son una pequeña parte en la propiedad de la chocolatería. Tanto tu amigo como los 100 inversores más, ya no son acreedores tuyos (no tienes una deuda contraída con ellos), sino que son propietarios con todos sus derechos y obligaciones. Lógicamente, cada cual en la parte proporcional a su contribución inicial.
Insisto en las obligaciones, -entre otras- asumir las pérdidas, para recalcar que tanto los emprendedores, empresarios como inversores arriesgan su propio dinero y que puede acabar mal. Es lógico, por tanto, que tengan el derecho a disfrutar de los beneficios, es decir, de la rentabilidad del negocio. Como ya vimos, la rentabilidad es la recompensa de asumir el riesgo. Quién no arriesga, no gana.
Fíjate en la analogía con las participaciones del sorteo de Navidad. Cuando una persona decide libremente que su décimo es repartido entre sus amigos y/o familiares, está cediendo una parte de la propiedad del mismo. No importa que tú conserves el décimo en tu posesión o que lo hayas pagado completamente. Si ellos tienen una participación con tu firma, son copropietarios en la proporción asignada. Para lo bueno (si toca el premio) o para lo malo (si no toca nada).
En el caso probable de perder, nadie reclama nada al poseedor del décimo porque se es consciente de que había puesto el dinero en riesgo y se asumen las consecuencias.
Con la chocolatería ocurre lo mismo. Si el negocio va mal y cierra, tanto los dos principales inversores (tú y tu amigo) como el resto pierden su dinero. Nadie debe nada a nadie. Todos pierden porque todos eran copropietarios. En el caso contrario, si el negocio prospera y reporta beneficios, cada inversor recibirá su parte de la tarta correspondiente.
2. ¿Qué es una acción bursátil?
Esa participación de una empresa que cotiza en Bolsa se denomina acción bursátil o simplemente acción.
En definitiva, una acción es un título de propiedad de una empresa regulada bajo el paraguas de los supervisores gubernamentales.
Dicho de una manera aún más sencilla, cuando compras una acción de Apple, eres dueño de dicha empresa en la parte proporcional que te corresponda (quizá un 0,0000001% o menos aún).
Cuántas más acciones tengas, mayor será tu propiedad
Comprando una acción de una empresa cotizada, se pasa de ser un simple consumidor de sus productos a ser dueño de la misma. Por eso, las acciones son activos ya que pueden generar dinero.
Yo, personalmente, tengo acciones de la empresa japonesa matriz del grupo donde trabajo. Y no lo hago porque crea que es la mejor empresa del mundo (Home Bias), sino más bien por la tonta idea de sentirme un poco dueño de la misma y así recibir -como inversor- mi parte correspondiente de los beneficios que yo mismo he contribuido a generar con las horas de mi vida como empleado.
Evidentemente, las acciones de MI empresa (fíjate cómo recalco mi propiedad) ocupan una pequeña cantidad en mi portfolio para minimizar el riesgo de agrupación o concentración (cluster risk o concentration risk). Es decir, si a mi empresa le fuera mal, ocurren dos efectos negativos simultáneamente:
- Mi puesto de trabajo estaría en peligro.
- Las acciones de la empresa bajarían o se hundirían, perdiendo dinero.
3. ¿Qué derechos te proporciona ser propietario de una empresa?
Los propietarios, es decir, los accionistas tienen básicamente dos derechos fundamentales:
- Voto en la Junta General de Accionistas (derecho político)
- Dividendos si la empresa los reparte (derecho económico).
3.1. Junta General de Accionistas
En la Junta General de Accionistas, la directiva de la empresa rinde cuentas a sus propietarios. En ella, se deciden todos los asuntos relevantes para la compañía como por ejemplo:
- Aprobación de las cuentas anuales
- Distribución de los resultados del ejercicio anterior (beneficios en forma de dividendos)
- Nombramiento, reelección o ratificación de los consejeros.
- Nombramiento, reelección o sustitución de los auditores externos
- Modificaciones de los estatutos
- Decisiones sobre ampliaciones de capital…
El voto de cada accionista no tendrá el mismo peso, sino que será proporcional al número de las acciones que disponga. Lógicamente, a mayor número de acciones en posesión, mayor poder de decisión.
3.2. Dividendos
En la Junta General de Accionistas, se determina la distribución de los beneficios tanto en cuantía como en ritmo. A éstos se los conoce como dividendos.
Los dividendos no son más que el reparto de los beneficios netos (ya libres de impuestos) entre todos los accionistas. Pueden ser mensuales, trimestrales o anuales. Cada sociedad lo estipula de una manera diferente.
No todas las compañías distribuyen dividendos entre sus accionistas, ya que prefieren reinvertir los beneficios de la empresa en nuevos procesos o tecnologías para seguir creciendo (Growth companies). Para los accionistas, este tipo de empresas puede ser interesante porque confían en su crecimiento, lo que conlleva a una subida en su valor bursátil. Es decir, la acción valdrá más que el precio de compra en el pasado y ahí tendrá su beneficio el inversor. Ejemplos de empresas de crecimiento son: Tesla o Alphabet (Google) que no reparten dividendos.
Hay, sin embargo, otras empresas consolidadas en sus respectivos sectores que ya han demostrado su valor (Value companies) y dedican menos esfuerzos en crecer. Por eso, suelen repartir dividendos como incentivo para los accionistas. Un ejemplo claro de Value sería Coca Cola. Su principal producto lleva más de cien años en el mercado sin prácticamente modificaciones.
Es importante saber que los dividendos cobrados con anterioridad no dan derecho a futuros dividendos. Es una decisión que debe ser tomada cada ejercicio económico por la Junta General de Accionistas. En ejercicios complicados, muchas empresas reducen sus dividendos o los eliminan.
4. ¿Dónde se ejecuta la compraventa de una acción?
Las transacciones de venta/compra de las acciones corporativas se realizan en un mercado establecido para ello, la bolsa de valores.
Para poder cotizar en bolsa, las empresas deben cumplir una serie de requisitos legales, establecidos en la legislación vigente de cada país y siempre bajo la supervisión del órgano de control estatal.
En España, el organismo encargado es la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). En Alemania, es el Bundesanstalt für Finanzdienstleistungsaufsicht (BaFin).
Puedes consultar aquí las distintas comisiones nacionales.
5. ¿Qué requisitos necesita una empresa para cotizar en bolsa?
Para empezar, debe ser constituida como Sociedad Anónima (S.A.) en España o como Aktiengesellschaft (AG) en Alemania inscrita en los registros mercantiles y de valores correspondientes.
Además, las empresas que cotizan en bolsa deben cumplir algunas condiciones formales y económicas:
- Solicitud formal de admisión
- Superación de un proceso de análisis y verificación por parte del supervisor correspondiente en cada país, según los requerimientos establecidos por la ley.
- Entregar documentos acreditativos como los estatutos de la empresa, los acuerdos sociales de emisión, auditoría de cuentas y un folleto informativo de operación.
- La empresa debe contar con un capital mínimo y que esté repartido entre un mínimo número de accionistas, no superando un límite porcentual cada uno. Para cotizar en España, la corporación debe disponer de 1,2 M€ entre al menos 100 accionistas, pero ninguno de ellos puede superar el 25% del capital social.
- Unos beneficios estables.
Por tanto, deben ser sometidas a un constante y estricto control por las autoridades y deben ofrecer la máxima transparencia hacia los inversores (informes trimestrales públicos, balance de cuentas…).
De hecho, esa negativa a la transparencia fue uno de los motivos de que Twitter dejase de cotizar en la Bolsa de Nueva York tras ser adquirida por el magnate Elon Musk. Quería hacer y deshacer a su gusto sin que nadie pudiera decidir.
6. ¿Por qué fluctúan los valores?
Seguramente has visto las gráficas con líneas ascendentes y descendentes de manera irregular que recuerdan a un cardiograma. Estos movimientos se deben básicamente a la ley de la oferta y de la demanda aplicada a cada instante durante la jornada bursátil.
Si hay muchos inversores interesados en un valor bursátil determinado (elevada demanda) más allá de la oferta disponible, el precio de la acción subirá. En cambio, si en un instante concreto, los inversores no quieren poseer más esa acción, provocará un descenso en el precio.
Si se da una situación de pánico generalizado (justificado o no), la acción se desploma y la empresa puede quebrar como sucedió hace unas semanas con el Silicon Valley Bank.
Ocurre exactamente igual con las notas de corte para la entrada en la universidad. Si hay una carrera muy demandada por los futuros estudiantes (por ejemplo, Medicina) y como las plazas ofertadas en las universidades son limitadas, sólo entrarán aquellos alumnos con las calificaciones más altas (precio muy alto).
Contrariamente, aquellas carreras menos solicitadas (no importa la razón), su nota de entrada es más baja. Y ese precio (la nota de entrada) no indica la calidad de la carrera en sí misma, sino la preferencia de los estudiantes.
El precio de una acción de una compañía no es indicador de su valía. Un claro ejemplo sería cuando una empresa desea realizar un split, es decir, divide el precio unitario de la acción a cambio de darte más acciones. Por ejemplo, un split 4:1 significa que el precio de tus acciones se reduce a la cuarta parte, pero cuadruplas el número de acciones, quedándose su valor real constante.
En realidad, es una técnica de márketing que se suele hacer para atraer a nuevos inversores al tener precios más bajos la acción.
Por tanto, lo reseñable es conocer la tendencia porcentual de si el valor está al alza o en descenso para determinar si una empresa atraviesa problemas o no. A veces una acción baja por motivos sólidos financieros como los resultados de Meta en 2022, por motivos simbólicos e irracionales como la caída de Coca Cola tras un gesto de Cristiano Ronaldo en una rueda de prensa, por unas declaraciones del político de turno, por una caída global de las bolsas, por la situación geopolítica…
7. ¿Cómo se determina el valor de una acción en concreto?
Cuando una compañía decide salir a bolsa y consigue los permisos necesarios de los organismos regulatorios correspondientes, hay un proceso dónde se fija el precio inicial de la acción en el que cotizará por primera vez.
Esto se hace a través de una Oferta Pública de Venta (OPV) en el que se recurren a varios agentes que determinan el valor de la empresa analizando los datos económicos: los activos que tiene la empresa, el balance actual, los beneficios y las previsiones de ingresos del futuro. Por su parte, la empresa decide poner a la venta un número de acciones en el mercado.
La división entre la valoración de la empresa y el número de acciones dará como resultado el precio inicial de la acción.
Por ejemplo,
La empresa A está valorada por 10 millones de € y pone a la venta 1 millón de acciones. Por tanto, el precio inicial será de 10 €.
A partir del momento de la emisión de acciones, el precio fluctúa en el mercado según la ley de la oferta y la demanda. Por una parte, hay inversores interesados en comprar la acción a la par que hay otros interesados en la venta. Todos ellos introducen órdenes de compra y venta que se van ajustando hasta alcanzar un equilibrio.
Al final, la bolsa regula que se puedan hacer el mayor volumen de operaciones posibles. Y esto ocurre cada minuto durante la jornada bursátil. El precio de la última operación será el precio final de la acción, ya que la oferta y la demanda se habrá ajustado.
Pondré un ejemplo muy simplificado que pueda explicar el mecanismo de funcionamiento de la bolsa.
Supongamos que el precio de cada acción de una empresa cualquiera es 20 €. Hay tres inversores interesados en comprar acciones de dicha empresa.
- El inversor 1 emite una órden de compra de 5 acciones cuando el precio alcance los 19,5 €, es decir, ese es el precio máximo que está dispuesto a pagar por esa acción.
- El inversor 2 quiere comprar 70 acciones a cualquier precio.
- El inversor 3 está dispuesto a comprar 10 acciones a 19,3 € por acción.
Asimismo, hay tres accionistas, que por distintos motivos, se quieren desprender de unas acciones.
- El accionista 1 desea vender 10 acciones a cualquier precio.
- El accionista 2 emite una órden de venta de 10 acciones, cuando alcance 20,4 €.
- El accionista 3 está dispuesto a vender 50 acciones si la acción sube hasta los 20,2 €.
¿Cuál es el precio final?
Veámos las distintas combinaciones posibles:
Combinación 1: precio a 19,3 €
ÓRDENES DE COMPRA | ÓRDENES DE VENTA |
---|---|
Inversor 1: Compra 5 acciones | Accionista 1: Vende 10 acciones |
Inversor 2: Compra 70 acciones | Accionista 2: No vende |
Inversor 3: Compra 10 acciones | Accionista 3: No vende |
TOTAL COMPRA: 5 + 70 + 10 = 85 acciones | TOTAL VENTA: 10 acciones |
Sólo se pueden intercambiar 10 acciones. En este caso, hay más personas dispuestas a comprar (demanda) que a vender (oferta), por lo que el limitante es el accionista 1.
Combinación 2: precio a 19,5 €
ÓRDENES DE COMPRA | ÓRDENES DE VENTA |
---|---|
Inversor 1: Compra 5 acciones | Accionista 1: Vende 10 acciones |
Inversor 2: Compra 70 acciones | Accionista 2: No vende |
Inversor 3: No compra | Accionista 3: No vende |
TOTAL COMPRA: 5 + 70 = 75 acciones | TOTAL VENTA: 10 acciones |
Exactamente igual que en el caso anterior, sólo se pueden intercambiar 10 acciones (las del accionista 1).
Combinación 3: Precio a 20 €
ÓRDENES DE COMPRA | ÓRDENES DE VENTA |
---|---|
Inversor 1: No compra | Accionista 1: Vende 10 acciones |
Inversor 2: Compra 70 acciones | Accionista 2: No vende |
Inversor 3: No compra | Accionista 3: No vende |
TOTAL COMPRA: 70 acciones | TOTAL VENTA: 10 acciones |
10 acciones (las del accionista 1).
Combinación 4: Precio a 20,2 €
ÓRDENES DE COMPRA | ÓRDENES DE VENTA |
---|---|
Inversor 1: No compra | Accionista 1: Vende 10 acciones |
Inversor 2: Compra 70 acciones | Accionista 2: No vende |
Inversor 3: No compra | Accionista 3: Vende 50 acciones |
TOTAL COMPRA: 70 acciones | TOTAL VENTA: 10 + 50 = 60 acciones |
Hay más vendedores dispuestos a ceder parte de su propiedad por un precio que consideran justo. En total, se intercambian 60 acciones.
Combinación 5: Precio a 20,4 €
ÓRDENES DE COMPRA | ÓRDENES DE VENTA |
---|---|
Inversor 1: No compra | Accionista 1: Vende 10 acciones |
Inversor 2: Compra 70 acciones | Accionista 2: Vende 10 acciones |
Inversor 3: No compra | Accionista 3: Vende 50 acciones |
TOTAL COMPRA: 70 acciones | TOTAL VENTA: 10 + 10 + 50 = 70 acciones |
El volumen total asciende a 70 acciones.
Como el mayor intercambio de acciones se produce en la combinación 5, el precio final de la acción se fija en 20,4 €. En este caso, todos los accionistas del ejemplo venden sus acciones al inversor número 2.
El nuevo precio de 20,4 € no cumple las expectativas de los otros dos inversores (1 y 3) y para ellos no se ejecuta la operación. No han podido comprar al precio deseado. Su orden de compra tendrá lugar cuando se cumpla la condición establecida.
Analizando desde una óptica más amplía, vemos que el inversor 2 estaba dispuesto a comprar gran cantidad de acciones a cualquier precio (mucha demanda). Esa fuerte demanda se vio satisfecha justo con las acciones del accionista 2 que “impuso” el precio final de la acción en ese instante. De hecho, si este accionista hubiera exigido un precio de 20,5 €, la acción hubiera subido hasta esa cantidad.
Sin embargo, también podría haber ocurrido de una manera totalmente diferente. Si el mismo inversor 2, en vez de querer 70 acciones, deseaba comprar tan sólo 4, habría más oferta que demanda, es decir, más personas dispuestas a vender que a comprar y el precio de la acción bajaría hasta 19,3 € (máximo volumen de transacciones).
O incluso si el accionista 3 hubiera estado satisfecho vendiendo sus activos por 19,4 €, el precio final hubiera sido diferente al mostrado en el ejemplo.
Vemos cómo con tan sólo 6 personas en juego las posibilidades son enormes. Con muchos más inversores, el sistema se complica exponencialmente a la vez que cada inversor desempeña un papel de influencia menos relevante. Es el mercado, el conjunto de todos los inversores, quien ajusta el precio de una acción.
Espero haber explicado de una manera comprensible para todos qué es una acción y los conceptos más básicos del tema. Es un asunto bastante extenso que se irá tratando en sucesivos artículos. Si te ha quedado alguna duda, escribe un comentario o ponte en contacto conmigo directamente en:
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